Científicos que investigan la telomerasa en las langostas han descubierto que estos animales no envejecen. Siguen creciendo toda su vida hasta que son devorados por depredadores.
Según dicen se debe al efecto de la enzima (telomerasa) que les permite no envejecer. Sus cuerpos no se estropean con el tiempo y cada vez son más fértiles, aunque el aumento de tamaño les complica la subsistencia.
Las langostas (Palinurus elephas) son una variedad de crustáceo marino que se alimenta de carroña y casi cualquier cosa.
Fuente: Chimes
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